*Una terrible pinza entre Obiang Nguema y los
rusos, me hizo abandonar Guinea Ecuatorial y exiliarme en España.
*El PERDÓN, cristiano, y la reconciliación
nacional, un firme compromiso del Partido del Progreso, en la TRANSICION.
Por Severo-Matías MOTO NSA, Presidente del
Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial
Cincuenta
años inyectando, violentamente en el alma del pueblo guineano esta “revolución
maciísta”, para dejarlo vacío del peso que occidente inyectó en su alma,
durante largos decenios, hacen que Guinea Ecuatorial, obliga a presentar a
nuestro pueblo una oferta política que parta de una IDEOLOGIA con elementos de
fuerza y peso para reconectar con el alma humana política, social, cultural,
intelectual, económica y de desarrollo que informó y adornó al pueblo guineano
para hacerlo pueblo envidiable e imitado por países del entorno.
Sin
cuestionar, de inicio, la ciega y “revolucionaria” pelea de Macías y
Obiang Nguema por hacerse con Guinea Ecuatorial y convertirla en un país
comunista o socialista; simple, pero seriamente, nos permitimos exigir, primero
que los socialistas y comunistas, se tomen la molestia de enseñar, educar y
formar a nuestro pueblo en esas doctrinas políticas. Mientras esto hacían, nos
permitimos el deber y derecho de exigir que dejen a Guinea Ecuatorial, analizar
las diferentes ideologías que animan a los líderes políticos (Empezando por
Obiang Nguema) y a sus partidos y militancia (empezando por el PDGE) ¿Qué
ideología política, de las que mueven el mundo, inspira la acción del líder y
su PDGE, en Guinea Ecuatorial? ¿No es el modo de partido único, pensamiento
único y un solo hombre…?
El
Partido del Progreso de Guinea Ecuatorial (PP) y yo, su presidente, nos movemos
por la ideología política DEMÓCRATA CRISTIANA DE CENTRO, que alimenta y da
fuerza y orientación a partidos y gobiernos como Alemania, por resumir en un
modelo, la fuerza política de ese Occidente en el que nacimos a la cultura, a
la civilización, a la formación y nos proyectábamos hacia la globalidad, hasta
que la independencia, de la mano de Macías Nguema y Obiang Nguema nos apeó de
todos estos valores occidentales y nos hundió en el comunismo o socialismo.
Cuando
llegamos a Guinea Ecuatorial en 1992, en un segundo viaje, desde el exilio, en
busca de legalización del Partido del Progreso, lo tenía muy claro. Guinea
Ecuatorial, con Macías Nguema y Obiang Nguema había caído en picado; del
prestigio y nivel al que le había conducido el “status” de Provincia, y el de
Autonomía, a las ignotas y oscuras profundidades del comunismo. Hay
grandes africanistas y panafricanistas guineo ecuatorianos que aseguran que
África no se mueve por ideologías; sino por las personas. No creo que haya nada
más peligroso que un líder de un partido político (más aún, un presidente de un
país) que no se mueva por ideología política alguna. Y en cualquier caso, su
forma de gobernar revela fácilmente con qué ideología política coincide…
En
el caso de Macías y Obiang Nguema 50 años en total de gobierno, no cabe duda
alguna. Al odiar y abandonar España (Occidente) Macías se echó en las
manos de Rusia, China, Corea del Norte, Cuba, antigua Alemania
Democrática; decretó odio y persecución a TODO lo que oliera a occidente. En su
último congreso del partid único (PUNT) Macías tenía proyectado declarar a
Guinea Ecuatorial un estado comunista; aunque no lo promulgó ni decretó. Hasta
el gran Secretario General del PUNT (Buenaventura Ochaga Ngomo) se mostró
extrañamente contento porque no se había decretado el estado comunista a Guinea
Ecuatorial.
Desde
entonces, y ya son casi 50 años, nada, que no sea del modelo comunista
“revolucionario” se mueve con soltura en Guinea Ecuatorial.
Un
partido de corte demócrata cristiano, occidentalista, y de economía de mercado
como lo es el Partido del Progreso, sobra, molesta, incomoda y “no tiene
espacio” en la Guinea Ecuatorial de Macías y de Obiang Nguema.
Justo,
este derecho, esta libertad y este espacio es el que el Partido del Progreso
reclama, exige y revindica al régimen comunista o socialista de Obiang
Nguema. No es fácil, como se ha visto. Pero es igualmente claro que no es fácil
tampoco que el Partido del Progreso, perseguido, odiado, envidiado, asediado,
prohibido… pero anclado en el silencio del corazón ardiente del pueblo
guineano, deje de pedir su rehabilitación y su espacio de presencia y actividad
en la sociedad de Guinea Ecuatorial.
No
se trata, en absoluto, del “Quítame el comunismo o el socialismo, para que me
ponga yo, Democracia Cristiana”
Se
trata de algo más sencillo. Se trata de una prueba irrefutable: Ábrannos o
déjennos, a los guineanos, abrir las puertas de las elecciones libres, limpias,
transparentes y democráticas, para que el pueblo guineano se pronuncie
libremente en las urnas.
¿POR
QUÉ ME EXILIÉ Y ABANDONÉ MI PAIS?
La
razón profunda de mi decisión de marcharme de Guinea Ecuatorial y
exiliarme, en 1981, solo tiene un a y única explicación. Salí de Guinea, un 19
de diciembre de 1981; pero la decisión fue tomada el 6 de noviembre de ese año
(Día de mi 38º cumpleaños) Ese día, el Presidente Obiang Nguema decidió
culminar los pasos que venía dando para alejarme de su cercanía y de la
difícil colaboración.
Motivo:
“Los rusos se quejan de que no eres amigo suyo; que das información
desfavorable a ellos. Además: ¿Qué problemas tienes con el comunismo?”
Efectivamente,
desde mi cargo de Secretario de Estado de Información, los rusos tejieron una
corona de espinas sobre mi cabeza, acusándome de que los trataba mal en
los boletines informativos de Radio y Televisión. Ya, antes de esta
sesión, y unos años antes de que diera el golpe de estado contra su tío, yo
había tenido otros encontronazos con el Teniente Coronel Obiang Nguema; siempre
con el mismo motivo: ¿Qué problema tienes con el comunismo” con el
Teniente Coronel, Obiang Nguema Mbasogo, antes de que diera el golpe de estado
contra su tío Macías. Yo ya había estado 3 años en la cárcel de Black Beach,
bajo sus órdenes como “Jefe” que era, de Prisiones de Guinea Ecuatorial.
Las
noticias de alcance internacional que se daban en los medios de comunicación
del régimen, eran previamente captadas y grabadas de las emisoras de países
francófonos y anglófonos del entorno de Guinea Ecuatorial. Traducidas, eran
infaliblemente llevadas, con las noticias nacionales, al Presidente de la
República. Antes de devolver el boletín de noticias a los medios, estas sufrían
una severa y minuciosa censura del Presidente, que borraba con violento
bolígrafo las que no le parecían bien. Ni yo, como Secretario de Estado de
Información, ni los locutores de turno, podían alterar el boletín informativo,
una vez aprobado por el Presidente de la República.
Unos
días antes de que yo fuera requerido por el Presidente Obiang Nguema, aquel 6
de noviembre de 1981, me recibió el Vicepresidente (Don Florencio Maye) quien
me confesó, preocupado:
“Los
rusos no dejan de acusarte ante el Presidente. Dicen que eres su enemigo;
porque das malas noticias por la radio sobre ellos. El Presidente me ha dicho
que te advierta… Yo he evitado, ya varias veces, que te cese. Porque no
tenemos otro periodista...”
A
mi explicación sobre el proceso que siguen los boletines informativos, antes de
ser leídos en las emisoras, Don Florencio Maye, me dijo: “Ellos quieren que
si las noticias sobre la Unión Soviética son malas, las corrijas; para
demostrar que somos amigos…”
El
día 6 de noviembre de 1981, el presiente Obiang Nguema escenificó en su palacio
presidencial su propósito de alejarme de su entorno, por no ser, (¿Como él?),
un comunista’; ¿O, por presiones de la Embajada Soviética? Me mandó presentar
mi dimisión. Yo la presenté. Y decidí poner tierra por medio.
¿Y…
EN ESPAÑA?
Exiliado
en España, en 1982, un año después, el 25 de febrero de 1983, presenté en
público un partido de oposición al régimen dictatorial de Macías Nguema y
Obiang Nguema. El Partido del Progreso. Y, simple y “cómodamente”, en
consecuencia con mis profundas convicciones, dotamos a nuestro partido de la
ideología DEMÓCRATA CRISTIANA. ¡¡¡Fue como si hubiera echado un bidón de
gasolina a la hoguera de odio, persecución, amenaza y maldición que el
tema “comunismo” había creado sobre mí, muy inmerecidamente, en Guinea
Ecuatorial!!!
En el próximo y último artículo,
hablaré sobre la solución que propongo al Partido del Progreso, al pueblo
guineano y al mundo que se mueve en nuestro entorno…