Por estudiante guineano en España
La mayor parte de los procesos de independencia de muchos países africanos han estado dirigidos, yo diría condicionados, por los llamados "movimientos de liberación" de ideología socialista radical. Todos estos movimiento han venido de la mano, bien del PCUS (Partido Comunista de la Unión Soviética), del PCCh (Partido Comunista Chino) o por la presencia directa de Cuba y del PCC ( Partido Comunista Cubano). Se puede decir con esto, que el comunismo ha sido importado a Africa por estas tres naciones, símbolos de la ideología de izquierdas en su tiempo, a modo de una nueva conquista o de un neocolonialismo. Los diferentes partidos nacidos de estos movimientos, han ido marcando su influencia, radical o moderada, según el tipo de sociedad en la que se han desarrollado y la particular impronta que han marcado sus propios dirigentes. Los resultados no han podido ser más desoladores para este continente: la mayoría de los países han sufrido largas guerras, como el caso de Angola (MPLA contra UNITA) y también han contribuido a eternizar en el poder a muchos dictadores. A diferencia de Asia, el socialismo marxista-lenilista o maoísta, importado de Europa, o de la propia Asia, no ha conseguido penetrar en la sociedad africana, debido a la espiritualidad y al sentido de trascendencia de los africanos, muy alejados del materialismo histórico y de la visión atea y finita de la vida, propugnada por esta ideología.
En Ghana el Partido de la Convención del Pueblo de Kwame Nkrumah, puso las bases para un estado comunista moderado que duró 9 años. Después de varios golpes de estado y mucha inestabilidad política, hubo que esperar hasta 1992, año en el que se redacta una nueva constitución, la cual incorpora al gobierno el sistema de partidos actualmente vigente. También en Benin, la tardía independencia fue protagonizada por los partidos comunistas moderados: El Partido Comunista de Benin y el Partido de la revolución popular.
Mozambique y Angola han sido, por excelencia, los países comunistas de Africa. Mozambique, nada mas acceder a su independencia de Portugal en 1975, se enzarzó en una larga guerra civil protagonizada por el Frelimo, con apoyo de la Unión Soviética y Cuba y la opositora Resistencia Nacional Mozaqmbiqueña (Renamo), apoyada por Sudáfrica. Esta terrible guerra civil se extendió desde 1977 hasta 1992. Ya en 1978 el Frelimo se había convertido en un partido comunista-lenilista, y su líder, Samora Machel, ocupó la presidencia del país con un régimen unipartidista, hasta 1992, fecha en que fue aprobada la nueva constitución, que consagra una república multipartidista.
También Angola ha estado sumida en una guerra civil desde 1975, cuando se independizó de Portugal, hasta 1992. En este escenario la Unión Soviética y Cuba entraron de lleno en apoyo a una de las dos facciones, el Movimiento Popular de Liberación de Angola (MPLA), de inspiración comunista, que tomó el poder. La Unión Nacional para la Independencia Total de Angola (UNITA), no reconoció el resultados de las elecciones de 1992 y siguió la guerra hasta 2002. En las diferentes etapas políticas de Angola, y desde 10 de diciembre de 1979, hasta hoy, ha estado gobernada por un dictador, amigo de Obiang Nguema; José Eduardo dos Santos.
En dos de los denominados países del Cuerno de Africa, Etiopía y Somalia, ha tenido también una gran penetración la Unión Soviética. En Etiopía con Megisto Halie Mariam, que gobernó desde 1977 a 1991. En Somalia la influencia rusa se produce después del golpe militar de Mohamed Sied Barre y continúa hasta que la URSS apoyó a Etiopía, rival de Somalia en la guerra entre ambas.
Congo Brazzaville, se considera el primer país comunista africano. En 1970, pasó a llamarse República Popular del Congo, adoptando como símbolos nacionales La Internacional, la bandera roja y la conocida hoz y el martillo, emblemas del partido comunista. Un régimen presidencialista gobernado desde 1997, por otro amigo inseparable de Obiang Nguema: el general Denis Sesson.
Otro inseparable de Obiang (casi de su familia), Manuel Pinto de Costa, Presidente de Santo Tomé y Príncipe, desde su independencia de Portugal en 1975. Secretario General del MLSTP (Movimiento de Liberación de Santo Tomé y Príncipe y educado en la extinta RDA (la Alemania socialista), en el más puro comunismo.
En Guinea Ecuatorial, el comunismo también estuvo presente en su independencia, pero de forma muy diferente. Aunque la independencia de nuestro país no estuvo marcada por ningún movimiento de liberación de inspiración marxista, Francisco Macías fue llevando el país paulatinamente hacia el modelo comunista, muy generalizado en esta época en Africa. La radicalización de su régimen y su viraje hacia la izquierda, no fue producto de una evolución ideología (su capacidad intelectual no llegaba a eso), sino más bien producto de una mente atormentada y resentida, que pretendía a toda costa, zafarse de la presencia de España, quizá, y así fue, para eliminar testigos, de las atrocidades que pensaba acometer contra nuestro pueblo. En su camino hacia un régimen revolucionario y dictatorial, tuvo mucho que ver la influencia de un siniestro personaje español, Antonio García Trevijano, republicano de izquierdas, que fue consejero de Macías durante mucho tiempo. En este sentido, Don Severo Moto, profundo conocedor de la historia de nuestro país, ha afirmado: "El último Congreso del P.U.N.T. de Macías Nguema, tenía como gran objetivo, proclamar a Guinea Ecuatorial, República Comunista. Fracasado este intento, sus corifeos lo cubrieron, al Presidente Macías, de títulos, condecoraciones, nombres heroicos; y finalmente “Presiente Vitalicio”. Y Obiang Nguema, que aplaudió hasta con las orejas lo de “vitalicio”, le dio, escasos meses después, un golpe de estado, asesinato incluido, a su tío Macías Nguema".
También en el régimen de Obiang Gguema, personajes de la izquierda más reaccionaria española, han estado durante mucho tiempo sosteniendo, legitimando y asesorando a su dictadura. Para ello han creado "asociaciones", diferentes grupos de lobbys, y hasta un partido político (CPDS), que les ha servido de correa de transmisión en Guinea Ecuatorial, para todo este conglomerado de intereses de personas y grupos, la gran mayoría, vinculados con la izquierda española. Aunque esta sucia y oscura maniobra ha costado mucho sufrimiento al conjunto de la oposición exiliada, hoy día ha quedado expuesta a la luz pública. Y de todo esto, tanto el pueblo guineano, como algunos incautos opositores, han podido tomar buena nota.
